El riesgo de incendios es “muy alto” y no se esperan lluvias
Misiones encendió las alertas y especialistas advierten que el fenómeno de La Niña podría extender condiciones de sequía.

Hoy se registraron incendios en varios puntos de la provincia.
Misiones entró en alerta esta semana luego de que el Ministerio de Ecología elevara el riesgo de incendios a “muy alto” en cuestión de días, con un mapa completamente naranja -color que indica la peligrosidad- que abarca todo el territorio. Asimismo, desde Alerta Temprana, informan máximas de hasta 35° para los próximos días y la escasa nubosidad indica que no se esperan lluvias en el territorio provincial.
El abrupto deterioro de las condiciones ambientales coincide con las proyecciones del técnico agrometeorólogo Ángel Olinuk, quien advirtió que la región enfrenta una alta probabilidad de sequía durante el verano, producto de la consolidación del fenómeno La Niña.
En diálogo con Acá te lo contamos por Radioactiva 100.7, Olinuk explicó que, aunque septiembre, octubre y parte de noviembre registraron lluvias por encima de lo normal, el escenario cambió de forma acelerada.
“Ya estamos con temperaturas del Pacífico que indican claramente que estamos bajo La Niña, y eso significa lluvias por debajo de lo habitual para Misiones”, señaló. Según estimó, el déficit hídrico podría extenderse desde fines de noviembre hasta cerca del otoño, ya que estos eventos suelen durar entre seis y siete meses.
El especialista aclaró que no se espera un verano con temperaturas extremas, pero sí un aumento sostenido del calor debido a la menor nubosidad. “Si tenemos escasez de lluvia, la radiación solar aumenta y las temperaturas suben”, explicó.
Este escenario combinará mayor insolación, suelo más seco y vientos favorables a la propagación del fuego, factores que justifican la alerta emitida por Ecología.
Sobre el impacto productivo, Olinuk indicó que los cultivos más vulnerables serán los hortícolas y el maíz en floración, que dependen de la humedad superficial. En cambio, especies perennes como yerba mate, té y forestales, con raíces más profundas, podrían resistir mejor el déficit hídrico, aunque su rendimiento igual podría verse comprometido si la sequía se prolonga.
El agrometeorólogo llamó a productores y municipios a anticiparse en la gestión del agua, proteger vertientes, represas y aljibes, y evitar labores que dejen el suelo expuesto. “Un terreno arado se seca rápidamente; mantener cobertura vegetal ayuda a conservar la humedad”, recomendó.
Con el riesgo de incendios ya elevado y un verano que se perfila seco y caluroso, la provincia se prepara para un período crítico. La combinación entre déficit de lluvias, aumento de temperaturas y condiciones propicias para el fuego obliga a extremar cuidados para reducir daños en áreas rurales y zonas de interfase, en los que el riesgo es mayor.


