María Corina Machado salió de la clandestinidad y se mostró en público por primera vez en Oslo
OSLO.- La líder opositora venezolana, María Corina Machado, apareció en público por primera vez a primera hora del jueves (hora local) tras salir de la clandestinidad en Venezuela, en el balcón del hotel donde se hospeda en Oslo, a donde llegó horas después de la ceremonia de entrega del premio Nobel de la Paz con el que se consagró este año.
La llegada de Machado había sido informada por el Instituto Nobel durante una improvisada rueda de prensa en el hall del Grand Hotel, desde donde salió a saludar. Según pudo confirmar LA NACION, antes de su aparición en público, la líder opositora, de 58 años, se reunió con su familia.

El momento en el que Corina Machado salió al balcón.
Machado no aparecía en público desde enero, cuando participó en una protesta en Caracas, la última vez que había salido de la clandestinidad en la que vivía desde agosto de 2024, tras denunciar un fraude en las elecciones de Venezuela del mes anterior.
Pasadas las 2:20 de Noruega, Corina Machado salió al balcón del hotel a saludar a la multitud que estaba afuera, mientras sonaba el himno venezolano y al grito de “libertad”. La ganadora del Premio Nobel se mostró conmocionada por el apoyo y bajó para encontrarse con los asistentes. Incluso se saltó el protocolo y trepó las vallas que habían puesto los miembros de seguridad para estrecharle la mano a quienes fueron a respaldarla.

Corina Machado se mostró conmovida por el respaldo de los asistentesLise Åserud - NTB Scanpix
Aclamada por los asistentes, la opositora venezolana recorrió un largo pasillo segmentado por vallas en el que las personas le gritaban con cariño. Corina Machado estuvo varios minutos saludando a la gente, les tiró besos y agradeció el apoyo. “Hasta mañana”, dijo finalmente a los seguidores y volvió al hotel.
Por la efusividad del reencuentro, Machado no dio un discurso, sino que priorizó saludar a la gente. "El abrazo que necesita toda Venezuela, gracias", fue lo único que llegó a decir en sus redes sociales como mensaje para su pueblo. En tanto, este jueves habrá una conferencia de prensa en la que la ganadora del Nobel de la Paz hablará públicamente.
Corina Machado trepó las vallas para saludar a los asistentes
Entre la multitud que viajó para la aparición pública de la líder opositora se encontraban periodistas y figuras políticas en el exilio como Leopoldo López, Lilian Tintori y Antonio Ledezma, todos radicados en España.
Casi a las 3, regresó al hotel acompañada por su madre, Corina Parisca, portando banderas con mensajes de apoyo, rosarios y estampas de santos que le entregaron sus seguidores. Un centenar de seguidores la esperaron cantando y gritando consignas por su país para verla saludar desde el balcón del Grand Hotel, un gesto que suelen hacer los laureados con el Nobel de la Paz en la capital noruega.
Tras la aparición pública de Machado, desde el gobierno argentino la saludaron por el Nobel de la Paz. La exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, escribió en sus redes sociales: “Qué emoción esto, Corina. Una historia de lucha, coraje y perseverancia que hoy se vuelve símbolo. No pude acompañarte por las obligaciones que tengo como nueva senadora, pero acá seguimos, como hace muchos años: firmes y del mismo lado, acompañándote en cada paso de esta lucha por la libertad”.
Durante la noche del miércoles, la hija de referente de la oposición, Ana Corina Sosa Machado, salió al balcón de la suite que aguardaba a su madre mientras seguidores clamaban por la presencia de la Nobel y gritaban “libertad”, en medio de una fuerte incertidumbre sobre el paradero de Machado.
El hotel en el que se hospeda Corina Machado
En diálogo con la periodista venezolana Carla Angola, Ana Corina afirmó que su madre llegaría a la capital noruega después de la medianoche del jueves (20 en la Argentina) y les pidió a sus compatriotas que se encontraban en Oslo que se acerquen para recibirla.
Según señalaron funcionarios norteamericanos al diario The Wall Street Journal, Machado escapó el martes en lancha desde la costa venezolana hacia Curazao, y allí abordó un avión privado rumbo a Oslo. Su huida fue coordinada por su equipo de seguridad y se produjo tras más de un año escondida, luego de que el gobierno de Nicolás Maduro intensificara la persecución contra su entorno político.
“No sabemos exactamente cuándo aterrizará, pero será en algún momento de la noche”, había afirmado a Reuters Kristian Berg Harpviken, director del Instituto Nobel. Una grabación de audio difundida por la institución el miércoles por la mañana confirmó que Machado ya estaba en viaje: “Estoy de camino a Oslo ahora mismo”, aseguró la dirigente, sin precisar desde dónde hablaba.
El Nobel sin la Nobel
La ausencia de la galardonada marcó la ceremonia celebrada durante la tarde en el Ayuntamiento de Oslo, donde un gran retrato suyo colgaba en representación. Fue su hija quien recibió la medalla y pronunció el discurso en su nombre, acompañada por la madre de Machado, Corina Parisca; y sus hermanos.
El auditorio estalló en aplausos cuando Joergen Watne Frydnes, presidente del Comité Noruego del Nobel, anunció que Machado viajaba hacia Noruega. El funcionario evocó a figuras como Nelson Mandela y Lech Walesa, y destacó la “pureza moral” necesaria para sostener una lucha democrática frente a una dictadura.

Ana Corina Sosa, hija de la líder opositora venezolana María Corina Machado, recibe el Premio Nobel de la Paz para su madre de manos del presidente del Comité Noruego del Nobel, Jorgen Watne FrydnesOLE BERG-RUSTEN - NTB
El discurso leído por su hija marcó uno de los momentos más emotivos de la ceremonia. Machado subrayó que el reconocimiento tiene un valor profundo para Venezuela y para el mundo: “Le recuerda al mundo que la democracia es esencial para la paz”, afirmó. Y añadió: “Si queremos la democracia, debemos estar preparados para luchar por la libertad”.
También insistió en que la causa venezolana trasciende fronteras: “La libertad se conquista cada día… un pueblo que elige ser libre contribuye con toda la humanidad”.
El anuncio de su inminente llegada desbordó la emoción entre sus familiares. Su hermana menor, Clara Machado, rompió en llanto al expresar: “En pocas horas espero abrazarla… Esto ha sido muy con
Ana Corina Sosa, igualmente conmovida, contó que no veía a su madre hacía dos años: “Estoy increíblemente agradecida porque, lo más probable, es que por fin pueda darle ese abrazo”.
Un país bajo presión y un liderazgo proscripto
Machado ganó por amplia mayoría las primarias opositoras de 2023, pero el régimen le prohibió competir en las presidenciales. En agosto de 2024 se ocultó después de que las autoridades detuvieran a dirigentes de su equipo en medio de denuncias de fraude electoral. Aunque el Consejo Nacional Electoral y el Tribunal Supremo proclamaron la victoria de Maduro, la oposición asegura que su candidato ganó por amplio margen y publicó las actas de mesa como prueba.
En su discurso, la líder opositora reflexionó sobre el deterioro institucional del país: “Cuando comprendimos la fragilidad de nuestras instituciones, ya era demasiado tarde”, dijo. Y recordó el ascenso de Hugo Chávez: “Cuando un cabecilla golpista fue elegido presidente, muchos pensaron que el carisma podía sustituir al Estado de derecho”.
El Nobel anunciado en octubre destacó sus esfuerzos por lograr “una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia” en Venezuela.
La premiación llega en un momento de tensiones crecientes: Maduro acusa a Estados Unidos y en particular a Donald Trump de intentar derrocarlo, mientras fuentes militares citadas por Reuters aseguran que las Fuerzas Armadas venezolanas planean estrategias de resistencia ante un eventual ataque extranjero.
(*) Agencias Reuters y AFP
LA NACION


