El Gobierno nacional confirmó que lanzará un RIGI para Pymes y anticipó a quiénes estará dirigido
El secretario de Industria, Juan Pazo, confirmó que el Gobierno nacional lanzará un Régimen General de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) orientado a las pequeñas y medianas empresas (pymes). El anuncio fue realizado durante el Alacero Summit 2024, que se celebra en Buenos Aires los días 30 y 31 de octubre.
“Estamos trabajando en un régimen de inversión productiva con amortización acelerada y un régimen específico para el IVA”, explicó Pazo en una charla con Martín Berardi, presidente de la Cámara Argentina del Acero (ACERO), al cierre del encuentro. El funcionario destacó que los beneficios del nuevo esquema “van a ser para inversiones incrementales”, con el objetivo de evitar afectar los ingresos fiscales actuales del Gobierno.
Pazo también mencionó que el sector de maquinaria agrícola podría ser uno de los beneficiados por este régimen. A pesar de provenir de un Gobierno que está valorando la apertura comercial, subrayó que “comparto el view que tiene el sector siderúrgico respecto de la agenda para la industria argentina”.
El secretario no adelantó que se implementen medidas de protección como las solicitadas por los industriales, pero aseguró que “toda mejora fiscal que haya se va a destinar a baja de impuestos”, algo que es reclamado por el sector productivo.
Berardi, en su intervención, resaltó la importancia del RIGI para las pymes, dado que las inversiones están orientadas a proyectos de un mínimo de USD 200 millones, lo que deja afuera a muchas cadenas de proveedores que dependen de inversiones más pequeñas. “Para poder entrar en el juego de la grande, la empresa chica tiene que hacer sus propias inversiones en modernización de equipos”, afirmó.
Además, Pazo reconoció que “el Mercosur es uno de los bloques más cerrados del mundo” y se mostró confiado en la posibilidad de alcanzar un acuerdo con la Unión Europea que permita abrir ese mercado a productos del bloque sudamericano.
En relación con los cambios globales, Berardi mencionó que la relocalización de proveedores, impulsada por conflictos internacionales, ha generado un nuevo interés en América Latina para la industrialización. El término que se utiliza actualmente es «nearshoring» o «friendshoring».
Por último, Berardi rechazó la idea de desregular la exportación de chatarra, un insumo fundamental para la industria siderúrgica argentina, y destacó: “Argentina importa el mineral de hierro de Brasil, porque el que tenemos es de baja calidad, por eso la chatarra es fundamental”. También señaló que la chatarra contribuye al proceso de descarbonización de la economía al ser completamente reciclable.