La asunción de las nuevas autoridades políticas de El Soberbio, realizada durante la mañana de este lunes 11-12 en la sede de la Biblioteca Gabriela Mistral, estuvo marcada por la sorpresiva “disputa” de la bancada oficialista, en especial el enojo del edil Liliana Carvallo, otrora muy allegada al intendente Roque Soboczinski, quien aspiraba a acceder a la presidencia o al menos a vice del HCD y finalmente se quedó sin nada, ya que ni siquiera fue designada en ninguna de las comisiones “como una especie de represalia”, lo que le provocó un profundo dolor y decepción.

En definitiva, y a propuesta del Poder Ejecutivo, y con el "extraño" apoyo (o no tanto) de los concejales del Partido Agrario y Social, Normelia Do Santos y César Ribeiro, fue electo como titular del cuerpo deliberativo Daniel Gauna y como vice, la  debutante en política, Cristina De Almeida (esposa del comerciante Polaco Romero), una de las cuatro a las que se le tomó juramento al igual que al propio Gauna, Ribeiro y a Kiko Sidoruk, quien llegó con el apoyo de Fabián “Ceferino” Rodríguez, dueño de la cadena de supermercados e intendente de San Vicente.

Una vez definida la elección, que se realizó en secreto y a papel cerrado, Liliana Carvallo, quien incluso habría propuesto como vice presidenta a Normelia Do Santos, pidió la palabra y desató todo su desagrado y su decepción con la decisión del Poder Ejecutivo, cónclave del cual ella no fue parte.

TIRÓ MUNICIÓN GRUESA

Además de cuestionar la manera en que se realizó la elección de la Presidencia, Carvallo se mostró visiblemente ofuscada por dos cuestiones centrales.

Por un lado, debido a la “desprolijidad y falta de claridad” en el balance anual del Poder Ejecutivo, para el cual pidió durante dos años seguidos "la designación de un contador" de parte del HCD pero nunca fue escuchada, e incluso se sintió ninguneada...

Y en otro orden, micrófono en mano y ante la perplejidad de los presentes, "denunció" por una especie de “nepotismo” al histórico asesor letrado del Concejo, Lucho Nielsen, cuya hija es empleada de la Municipalidad; al igual que la progenitora de Daniel Gauna, flamante abogada, quien hace muy poco tiempo fue contratada por la Muni. Con ello marcó una clara contradicción e incompatibilidad porque los representantes del Concejo Deliberante ejercen el rol de contralor del Poder Ejecutivo a cargo...

A partir de esta sorpresiva actitud de Liliana Carvallo se abre un interrogante en el HCD de El Soberbio, porque si los ediles del PAyS (Normelia Do Santos y César Ribeiro) realmente ejercieran un rol opositor, sumados a Kiko Sidoruk y a un posible portazo de Liliana Carvallo, el Oficialismo podría quedar en desventaja (3-4) y perder el control y la mayoría en el Concejo...

Aunque eso difícilmente pase porque siempre lo resolvió con dádivas o con favores, todo a costillas del bolsillo del pueblo, a espaldas del deseo popular de la gente...